TIEMBLAN | Gracias a Morena, los sindicatos del PRI están a punto de desaparecer

octubre 10, 2018

México.- Por unanimidad de 78 votos, el pleno del Senado ratificó el Convenio 98 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), los legisladores de Morena en el Senado de la República le asestaron un golpe a los sindicatos del sector obrero, campesino y popular que por décadas le han servido al PRI para mantener sus estructuras de poder.

Aunque en el 2015 el documento fue avalado por Enrique Peña Nieto, permaneció sin algún movimiento todo el sexenio hasta que hace unas semanas la bancada de Morena aprobó el acuerdo.

Para el abogado del Centro de Reflexión y Acción Laboral (CEREAL), Miguel Ángel Álvarez Rodríguez, la liberación del convenio provoca sin duda, provoca una fisura en el sistema tradicional de representación de los trabajadores.

“Yo creo que sí va a terminar impactando, no lo vamos a ver en un año, pero es como cuando tienes una represa y entonces hay una pequeña fisura, pero le vas pinchando a la fisura, tarde o temprano la fisura va rompiendo la represa. O una de dos: o se rompe la represa o abrimos las compuertas y entonces dejamos que fluya el agua porque la gente está cansada”, dice.

Álvarez Rodríguez precisa que la ratificación del Convenio es algo positivo para la vida laboral del país, aunque no comparte la forma en que el Senado de la República sacó adelante el documento, pues desde su punto de vista pudo haber socializado un poco más el contenido con los actores involucrados.

Lo que sí afirma, es que es el Convenio cuestiona el status quo que han mantenido las centrales obreras, campesinas, populares y del sector educativo, para darle a los trabajadores la posibilidad de ser escuchados.

“Eso me parece que es importante, un país que se ufana, porque en realidad no respeta los derechos humanos, pero sí un país quiere llegar a transformarse, a hacer un proceso democrático, tiene que empezar desde la base y la base productiva son los trabajadores y comúnmente a los que menos se menciona es a los trabajadores”, detalla.

El especialista menciona que el Convenio es un primer paso para terminar con la estructura del sindicalismo corporativo pero tendrá que continuar el trabajo a fondo con la fiscalización de los recursos que obtienen para evitar que sigan proliferando líderes con fortunas millonarias y empleados pobres.

El Convenio 98 de la OIT se adoptó en 1949 en Ginebra, Suiza, para salvaguardar los derechos de sindicalización y negociación colectiva a nivel internacional, pero en México nunca entró en vigor porque en el año de 1956 la Cámara de Senadores aprobó el documento con una reserva, la Cláusula de Exclusión que obligaba a los patrones a despedir a trabajadores que quisieran desafiliarse del sindicato contratante.

Sin embargo, la OIT no admite que se modifiquen sus convenios por lo que rechazó la propuesta del Gobierno mexicano. Hasta la fecha, dice el abogado, es común que en la industria electrónica y manufacturera se afilie a los trabajadores a algún sindicato sin que ellos tengan conocimiento, y peor aún, los patrones son los que pagan sus cuotas al gremio.

Tuvieron que pasar 62 años de la firma de dicho convenio para que el Senado de la República lo aprobara por unanimidad. No obstante la relevancia del acontecimiento, México tiene el deshonroso lugar de haber sido el último país de Latinoamérica en ratificar el convenio.

La Confederación de Trabajadores de México (CTM) es el sindicato obrero más grande del país, seguido de la Confederación Nacional de Organizaciones Populares (CNOP) y la Confederación Nacional Campesina, (CNC) que agrupan a millones de trabajadores y cuyos líderes han sido señalados por corrupción y lucrar con los votos de sus agremiados

La CTM tiene más de 82 años de creación, aglutina al menos 4 millones de trabajadores en 32 federaciones estatales y regionales, así como cientos de sindicatos nacionales y de industria. Desde los primeros líderes, Vicente Lombardo y Fidel Velázquez Sánchez, se volvió clave en el régimen corporativista del Partido Revolucionario Institucional (PRI).

Por otro lado, la CNC que está por cumplir 80 años fue fundada el 28 de agosto de 1938, es dirigida por el Senador Ismael Hernández Deras. El próximo 19 de agosto celebrarán elecciones internas y ya se aprobó el registro Hernández Deras, quien busca reelegirse.

De Jalisco para México

La Confederación Nacional de Organizaciones Populares (CNOP) fue fundada el 28 de febrero de 1942 en Guadalajara, Jalisco. Su líder actual es el también Senador Arturo Zamora Jiménez, quien al igual que Ismael Hernández, de la CNC, no ha hecho pública su declaración patrimonial.

Para Álvarez Ramírez, quien además se especializó en filosofía del derecho y filosofía política, la estructura actual de los sindicatos es más parecida a la de un sistema feudal o una dictadura porque sus líderes tienen cargos vitalicios y todos, han amasado fortunas aparentemente con las cuotas de sus trabajadores.

“Es un pequeño señor feudal que vive a perpetuidad donde le hereda a sus hijos o a quien quiere la dinastía y pueda abrir otros pequeños feudos, si te das cuenta líderes sindicales donde sus hijos son líderes sindicales, y curiosamente ninguno ha pisado las fábricas o los centros de trabajo”, resalta.

Desde su punto de vista, el sindicalismo tradicional no es la única respuesta para la representatividad laboral, pues ha cumplido un proceso histórico y está llegando a un proceso de recomposición en México, por lo que es momento de pensar en otras formas como agrupaciones colectivas.